Guía Completa para Realizar un Proceso de Sandblast

El sandblast, también conocido como granallado o chorreado abrasivo, es un proceso ampliamente utilizado en diversas industrias para limpiar, desgastar, o crear texturas en superficies mediante la proyección de partículas abrasivas a alta velocidad. Esta técnica es esencial para la preparación de superficies antes de aplicar recubrimientos protectores, eliminar corrosión y óxido, y restaurar materiales a su estado original. Para llevar a cabo un proceso de sandblast efectivo y seguro, es fundamental contar con el equipo y los conocimientos adecuados.

A continuación, presentamos una guía completa sobre lo necesario para realizar un proceso de sandblast:

1. Equipo de Sandblast:

Olla o Cabina para sandblast: Equipo diseñado para realizar el proceso de sandblast de manera controlada y segura. La cabina es una estructura cerrada que contiene material abrasivo permitiendo realizar la limpieza en un área contenida para minimizar el polvo. En cambio una olla, es un equipo portátil donde contiene y presuriza el material abrasivo como arena, granalla de acero, óxido de alumnio y otros para llevar a cabo el trabajo. En las ollas de presión si es necesario tener un área de trabajo exclusivamente para este proceso debido a la nube de polvo que genera.

Área de Trabajo: Un espacio confinado que permite contener el material abrasivo y los residuos generados durante el proceso. La cabina debe estar bien ventilada para eliminar el polvo y proteger a los operarios de inhalación de partículas.

Compresor de Aire: Proporciona la presión necesaria para impulsar el material abrasivo a través de la manguera y la boquilla.

Manguera y Boquilla: La manguera conecta el compresor de aire a la boquilla, que es el punto donde se proyectan las partículas abrasivas sobre la superficie a tratar. Es importante elegir una boquilla adecuada para el material a sandblastear y el tipo de superficie.

Material Abrasivo: Existen diferentes tipos de abrasivos, como arena, granalla de acero, bicarbonato de sodio, cáscara de nuez, óxido de aluminio, entre otros. La elección del material depende del objetivo del proceso y el tipo de superficie a tratar.

2. Equipo de Protección Personal (EPP):

Casco o Respirador de Aire: Protege la cabeza y los pulmones del operario contra la inhalación de partículas y polvo.

Máscara o Gafas de Seguridad: Protege los ojos y la cara del operario de la proyección de partículas abrasivas.

Guantes: Impiden el contacto directo de las manos con el material abrasivo y la superficie tratada.

Ropa de Trabajo: Debe ser resistente y cubrir todo el cuerpo para protegerlo de abrasiones y salpicaduras de material.

Protector Auditivo: Si el proceso de sandblast genera mucho ruido, se deben usar protectores auditivos para prevenir daños en la audición.

3. Preparación y Seguridad:

Inspección y Mantenimiento del Equipo: Antes de comenzar el proceso, verificar que todo el equipo esté en buenas condiciones y realizar el mantenimiento necesario.

Delimitar el Área de Trabajo: Asegurarse de que el área esté acordonada y señalizada para evitar que personas no autorizadas se acerquen durante el proceso.

Ventilación: Asegurar que la cabina o el área de trabajo tengan una buena ventilación para eliminar el polvo y los gases generados durante el sandblast.

Entrenamiento del Personal: Todos los operarios deben recibir una capacitación adecuada en el manejo del equipo y los procedimientos de seguridad para evitar accidentes y lesiones.

Control del Polvo: Utilizar sistemas de captura de polvo para reducir la dispersión de partículas y mantener el ambiente de trabajo limpio.

4. Técnicas de Sandblast:

Presión y Distancia: Regular la presión del compresor y mantener la distancia adecuada entre la boquilla y la superficie para lograr los resultados deseados sin dañar el material tratado.

Nivel de anclaje: Es un proceso que refiere al perfil de rugosidad que se crea en la superficie tratada despúes de aplicar el chorro abrasivo, es ayuda a lograr una mejor adhesión en los recubrimientos posteriores como pinturas o recubrimientos.

Movimiento Constante: Mantener un movimiento uniforme y constante al sandblastear para evitar la acumulación excesiva de material en un solo punto.

Ángulo de Ataque: El ángulo en el que se dirige el chorro abrasivo afecta la eficacia y el acabado del proceso.

Áreas Sensibles: Proteger áreas delicadas o componentes sensibles con cinta adhesiva u otros materiales antes del sandblast.

Para tener un proceso de sandblast exitoso requiere de una planificación, el equipo adecuado y capacitación del personal. Recuerda que el sandblast es un proceso potencialmente peligroso , por lo que el cumplimiento de las medidas de seguridad es esencial para proteger la salud de lo operarios y garantizar resultados óptimos.

Con el equipo adecuado y el enfoque correcto, el sandblast puede convertirse en una herramienta poderosa para lograr superficies limpias y preparadas para diversas aplicaciones industriales.